*/*/Lástima por aquellos que no se han dado cuenta de que pensar es un desprendimiento; es la maquinación y la exteriorización de lo que no puede quedar en la estrechez del pecho. Es creación y no hay porque sentirse culpables por reconocerlo, como tampoco hay que vivir con la angustia del error y una condena que se acerca. El conocimiento del método, la burla que le aplica el juego, la lectura y la imaginación no deben ser anuladas por alguna voz dictatorial que se escode tras las faldas blancas del autor o bien tras la sotana.

Hay palabras y ademanes políticamente correctos que resultan mucho más hirientes que éste gesto de honestidad. Si bien se dice constantemente que la Filosofía es una forma de vida, por esa misma razón, las apreciaciones acerca de la misma no son asunto de nadie más que las personas que asumen la experiencia y sin embargo, considero, algo que ha sido permanente bajo el marco maravilloso de la Filosofía, es el asombro, la escucha y las posibilidades que aparecen y desaparecen, tan plásticas y tan ofrecidas al mundo.